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MARX: DIALÉCTICA, HISTORIA Y COLONIALISMOS
HISTORIA DEL MARXISMO:CLASE 1-INTRODUCCIÓN

MUGRÓN


Sierra del Mugrón. Al NO del término municipal y con orientación S0 – NE, esta gran alineación montañosa posee unas altitudes medias de 1000 – 1100 metros, destacando el pico Mugrón (1209 m). Constituyen la divisoria con el término de Bonete, y de forma característica, sus pendientes son más abruptas en su flanco meridional. 

El Mugrón es la altura máxima del termino municipal de Almansa con 1.218 m sobre el nivel del mar. La cara Sur de la Sierra del Mugrón es practicamente inaccesible debido a su gran desnivel mientras que la cara Norte tiene menos desnivel. La vegetación de esta sierra esta compuesta por pinos, carrascas y monte bajo típico mediterráneo. La Sierra abarca los términos de Ayora (Valencia),  Almansa y Alpera (Albacete).




Se trata de un área montañosa caliza ubicada al Noroeste del municipio, con altitudes de 1200 metros. Aquí se encuentra el poblado ibérico. La importancia de esta área radica en que la menor accesibilidad de la misma ha propiciado que se hayan convertido en refugios tanto de fauna como de flora. En este sentido, destacan las comunidades de aves rupícolas nidificantes y también determinadas especies calcícolas y endemismos, así como formaciones relícticas de sabinar. Es Área de Interés Cultural, según el PGOU de 1989.



CASTELLAR DE MECA



En los alrededores se han encontrado vestigios de civilizaciones pasadas como al poblado ibérico existente al norte en el término municipal de Ayora.

Castellar de Meca ciudad Ibérica se encuentra, en el cerro del Mugrón, en su extremo noroccidental y a su vez cruce de caminos naturales entre las regiones del interior y las tierras del levante peninsular.

En una meseta del monte, sólo accesible por un punto, y por el que trazaron los iberos el camino que unía la ciudad- fortaleza con el llano, camino del que hoy aún se conservan importantes vestigios las huella dejadas por las ruedas de los carros, y pequeñas cavidades, donde ponían el pie las bestias que transportaban sus cargas. 

Los orígenes de Meca, están en la oscuridad; podemos afirmar sin embargo, que los primeros habitantes del monte Mugrón, datan de la época del Paleolítico, y buscaron refugio y habitación en las numerosísimas cuevas que circundan el monte, algunas de gran importancia, como la denominada “del oro”. Siglos pasaron hasta llegar al Neolítico y Eneolítico. Época en que se usaban a la vez armas de piedra y cobre. Estos mismos hombres fueron los que con el paso del tiempo y de los años se agruparon formando la ciudad de Meca, abandonando las grutas.

 

Meca fue una ciudad militar, y los motivos que incidieron a su construcción fueron los de poder defenderse mejor en caso de invasión, y poco a poco esta fortaleza defensiva se convirtió en una importantísima ciudad, que ocupaba más de 1.500 m2, situándose entre las mayores poblaciones iberas conocidas.   La ciudad de Meca se asienta sobre una meseta cortada a pico por el norte y por el oeste, y una casi vertical pendiente de muy difícil acceso la limitan por el este y por el sur. El único punto de contacto con el resto del monte estaba defendido por una torre, de la que aún se puede contemplar su base. Al nordeste estaba circundada por dos enormes muros de mampostería.

 

Por el lugar de más débil defensa está cortada la roca a una altura de cinco metros, y sobre ellas fuertes torres de sillería, que dejaba convertida a Meca en una ciudad inexpugnable. Los trabajos de excavación han permitido documentar las red de caminos carreteros, siendo el caso mejor conocido de protohistoria península  Su espectacular sistema defensivo y sus numerosos aljibes y depósitos de almacenaje. 

 

A pesar de la relevancia del lugar, Monumento Histórico-Artistico desde 1931, se desconoce el nombre que debió tener en el antigüedad y es aún escasa la información sobre su estructura urbanística y sobre el extenso territorio que debió jerarquizar, siendo objeto de discusión, también, la fecha de construcción y uso de las fortificaciones y aljibes. 

 

Este yacimiento muestras evidencias de ocupación desde la edad de Bronce ( siglo VI a de C.) , los Íberos ( siglo IV- III) y los romanos (siglo II- I ) hasta la edad Media (siglo XII- d. C.).

 

 Por último, han de destacarse las cuevas existentes en esta Sierra, como Cueva Negra y Cueva del Rey Moro, producto de la disolución de estas formaciones calcáreas. vestigios de una antigua civilización que pertenecen a una ciudad íbera denominada Meca, donde se han rescatado los restos de una torre romana, aljibes, viviendas, cerámica y un impresionante camino de carros excavado en la roca. La cueva del Rey Moro hundida debajo de la ciudad de Meca es un abrigo natural de 80 metros de largo, 15 de profundidad y unos 10 metros de altura que sirvió en tiempos prehistóricos de habitación. Desde esta cueva desciende un camino al abrigo bordeando el precipicio, y que en otro tiempo fue accesible para vehículos rodados, pues en el, se notan señales claras de las ruedas lo desgastaron. En toda la vertiente del cerro fuera del recinto amurallado, se ven claras señales de haber existido otra población o barrio anejo a lo que fue la ciudad de Meca; viviendas, sin duda para labradores y ganaderos. 

 

ORIGENES
Edad de Bronce ( S. VI a de C.)

Los primeros habitantes datan de la época del paleolítico, tratando de encontrar allí refugio en las numerosas cuevas que rodeaban este monte. Siglos pasaron hasta llegar al neolítico-eneolítico época en que se usaban Armas de piedra y cobre. su subsistencia se basaba en la agricultura, ganadería, caza, pesca. Con el paso del tiempo se agruparon formando la ciudad de Meca.

 

Poblado Ibérico (Siglo IV-III a de C.)

Dedicados a labores agrícolas, se servian del hierro para fabricar los aperos, la religión y los ritos funerarios marcaban sus vidas.El pueblo estaba fortificado, y dispuesto de graneros ,críaban caballos, cultivaban el cereal. En la zona oriental se localiza El Camino Hondo, las Casas excavadas en la roca y los aljibes. La cuidad Ibérica terminó a consecuencia de la conquista dE los romanos .

 

Poblado Romano (Siglo II-I )

La influencia del mundo íbero se mantuvo vigente durante los primeros años de la dominación romana. En la zona occidental se observan restos de una torre romana, no hay constancia de que hubiera elementos arquitectónicos, pero si se hallaron sillares de varios tamaños bien labrados. La carencia de objetos ,es debido a que tubo existir una pequeña población lo que se reduciría a un guarnición. No sabemos si hubo una etapa de abandono de la ciudad hasta la época medival pero sí se sabe a ciencia cierta que la población fue creciendo y extendiéndose por las laderas.

 

Poblado Medieval La población fue creciendo y extendiéndose por las laderas, sobre el camino íbero inutilizado, estaban ubicadas las habitaciones medievales rectangulares Siglo X d C. Se duda sobre el abandono definitivo de la ciudad, pero si se sabe que en siglo XV la cuidad estaba desierta a mediados del S. XIV se sufre el azote de la Peste Negra con un nivel de mortandad tan elevado que hizo desaparecer hasta pueblos enteros, quizás este tenga mucho que ver con el abandono definitivo de la ciudad.

 

CARACTERÍSTICAS

No hay datos de la Necrópolis, pero como todo poblado, lo tiene, posiblemente esté en la ladera, cerca de la entrada o un poco mas abajo por la finca.(en aquella época se hacían los enterramientos en los caminos para tenerlos siempre cerca y así no olvidarles).

 

La altitud es de 1046,3 m, la planta mide 15 Ha, es alargada e irregular, mide 808m de largo por 314m de ancho en el centro. El Castellar de Meca es importante por sus vías de comunicación, accesos, y por los sistemas defensivos: como murallas y torres realizadas con sillares de la propia roca excavada.

 

El emplazamiento queda directamente relacionado con “El Camino de Aníbal” o “Vía Augusta”. De ésta vía saldría un ramal secundario que surcaría toda la llanura almanseña. Tendría un trazado rectilíneo y pondría en contacto diversas villas como por ejemplo Las Torres o San Benito (zona que posiblemente abasteciera a la ciudad de Meca pues San Benito era rica en caza, pesca, y de tierras fértiles). 

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